La subida al Everest de 1980 marcó un antes y un después en el alpinismo vasco: Martin Zabaleta y el sherpa Pasang Temba pisaron el 14 de mayo la cima más alta del mundo y, junto a ellos, toda la expedición, todo un pueblo, hizo cima, invadidos por un sentimiento indescriptible.
La historia de esa expedición está recogida en formato cómic tras la colaboración de Bilbao Mendi Film Festival y la Editorial SUA.
El dibujante César Llaguno rememora la histórica ascensión con sus dibujos, dando vida al guion adaptado por Ramon Olasagasti.
Luis Mari ‘Petxu’ Sainz de Olazagoitia, Angel Lerma, Txomin Uriarte, Kike de Pablo, Felipe Uriarte y Luis Mari Abalde.
Museo Vasco-Euskal Museoa de Bilbao, hasta el 31 de diciembre
La subida al Everest de 1980 marcó un antes y un después en el alpinismo vasco: Martin Zabaleta y el sherpa Pasang Temba pisaron el 14 de mayo la cima más alta del mundo y, junto a ellos, toda la expedición, todo un pueblo tocó cima, invadidos por un sentimiento indescriptible. La historia de esa expedición está recogida en formato cómic gracias a la colaboración de Bilbao Mendi Film Festival y la editorial SUA. El dibujante César Llaguno rememora la histórica ascensión con sus dibujos, dando vida al guion adaptado de Ramon Olasagasti. Además del cómic, Bilbao Mendi Film Festival ha organizado una exposición con las viñetas más características e inspiradoras que recogen las vivencias de dicha expedición, así como el proceso de creación tras esta obra. En los diferentes paneles se podrán ver algunas de las viñetas más fascinantes; además, también se muestra la evolución de esos dibujos, desde que no eran más que simples bocetos hasta convertirse finalmente en la versión publicada en el libro.
César Llaguno (Barakaldo, 1972) y Ramon Olasagasti (Berrobi, 1972) dan vida a esta historia a través de los dibujos, gracias al buen trazo de uno y al guion del otro. Estos son los dos compañeros de cordada: César Llaguno es autor, entre otros, de innumerables dibujos y viñetas publicados en revistas como Oxígeno, El Mundo de los Pirineos, Alpinist, Trailrun y Euskal Herria; Ramon Olasagasti ha sido periodista en Euskaldunon Egunkaria y Berria y es autor del libro “Mendiminez” (Las cumbres del Alma). Ambos han ascendido, paso a paso, su propio Everest. César ha amontonado miles de borradores en su carpeta; si bien no ha caminado por la adversidad de la nieve, sí que ha trazado su camino a través de una página en blanco, tal como hizo la memorable expedición de 1980 que marcó un antes y un después en la historia de nuestro montañismo.
A la hora de escribir y adaptar el guion, los autores se han valido, entre otras fuentes, de los testimonios de la expedición y del libro de Felipe Uriarte que recoge este ascenso. Sobre esas primeras líneas empezó a trazar los primeros esbozos y dibujos César Llaguno; ya que, una vez consolidado el guion, los dibujos lo siguieron de cerca. Llaguno ha realizado miles de bocetos y cada uno ha sufrido innumerables alteraciones, hasta llegar así a la versión final. La historia del ascenso al Everest no empieza en 1980, sino mucho antes. El cómic viaja hasta 1967, el año en el que varios montañeros vascos ‒incluyendo a miembros de la expedición del 80‒ realizaron numerosos ascensos por los Andes. Poco después, y tras superar innumerables barreras políticas, se formó la famosa expedición “Tximist” de 1974. En aquella ocasión, si bien estuvieron cerca, no lograron hacer cumbre. Y así fue como llegó el segundo intento de 1980. Kike de Pablo y Xabier Erro dejaron Vitoria-Gasteiz en 1979; ya que, en aquella época, el material se transportaba en barco hasta India y, desde allí, en camiones a Nepal. Una vez en la montaña, los mendizales vascos y los sherpas emprendieron camino, uno detrás del otro. Hicieron frente a adversidades, accidentes e incluso momentos de total desesperación; hasta que el 14 de mayo, Martin Zabaleta y Pasang Temba llevaron hasta la cima el trabajo y el ímpetu de todo un equipo, además de la ilusión y la alegría de todo un pueblo. Tanto el cómic como la exposición reviven los momentos más memorables de un ascenso que llevó a todo un pueblo hasta la cima del mundo. Esta humilde exposición también busca homenajear a aquellos protagonistas que ya no están con nosotros.